La guía ESC/EAS 2019 para el manejo de las dislipidemias recomienda niveles de cLDL <55 mg/dL y al menos una reducción del 50% respecto a niveles basales en pacientes que han sufrido un infarto de miocardio (IM). No obstante,
datos de la práctica clínica muestran que el manejo del cLDL en estos casos es a menudo subóptimo.
Un equipo de investigadores europeos ha realizado una encuesta entre médicos para conocer el manejo de lípidos en la práctica clínica habitual durante el primer año tras un IM, así como el grado de implementación de la guía. El trabajo se ha publicado en Advances in Therapy.
Participaron un total de 360 médicos de seis países (Alemania, España, Francia, Italia, Países Bajos y Reino Unido), que completaron una encuesta cualitativa en línea entre diciembre de 2019 y junio de 2020. El 64,7% fueron médicos de atención secundaria (SCP), y el resto de primaria (PCP), la mayoría con más de una década de experiencia.
La mayoría de los pacientes que no recibían hipolipemiantes antes del IM iniciaron el tratamiento durante el ingreso
Los resultados muestran que, en promedio, el 90,7% de los pacientes que no recibían tratamiento hipolipemiante antes del IM lo iniciaron durante la hospitalización. Además, el tratamiento se intensificó en el 64,7% de los pacientes ingresados que ya recibían hipolipemiantes.
Más del 80% de los SCP y más de la mitad de los PCP informaron que si los pacientes no alcanzaban el objetivo de cLDL a las 12 semanas tras el IM procederían a un cambio en el tratamiento hipolipemiante. La mayoría de los SCP (82,0%) y más de la mitad de los PCP (55,1%) afirmaron referirse a los objetivos de la guía ESC/EAS 2019.
El trabajo también analizó las barreras para el inicio de iPCSK9, recomendados por dicha guía para intensificar el tratamiento en pacientes de muy alto riesgo que no alcanzan los objetivos de cLDL. La prescripción previa de estatinas a dosis máxima tolerada (49,4%) y/o ezetimiba (38,9%), y los requisitos previos para su autorización (30,4%) fueron algunas de las barreras identificadas.
Los autores concluyen que se encontraron diferencias en el manejo de lípidos en pacientes tras un IM en los distintos países, incluyendo divergencias entre las recomendaciones de la guía ESC/EAS 2019 y las guías locales. También consideran que el uso de fármacos hipolipemiantes innovadores podría reducir el riesgo de eventos cardiovasculares en estos pacientes de muy alto riesgo.
Referencia
Qureshi N, Antoniou S, Cornel JH, et al. European Physician Survey Characterizing the Clinical Pathway and Treatment Patterns of Patients Post-Myocardial Infarction [published online ahead of print, 2022 Oct 26].
Adv Ther. 2022;10.1007/s12325-022-02344-6.
doi:10.1007/s12325-022-02344-6SC-ES-AMG145-00747
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