La evolución del sector sanitario está siendo imparable. La tecnología ha permitido un crecimiento exponencial de las innovaciones médicas, que sin duda alguna están mejorando la salud general de los pacientes. Además, supone un gran avance para la relación médico-paciente, ya que aplicaciones como la medicina personalizada ayudan a entender mejor las enfermedades y tratarlas de la manera más optimizada.
Recientemente se ha celebrado la
I Jornada de Medicina Personalizada: realidades, retos y oportunidades, con el fin de abordar este nuevo paradigma y estudiar su futuro. Durante el evento, se destacó que el cuidado de la salud ha cambiado mucho en estas últimas dos décadas y que la mejor comprensión de las enfermedades se debe a la medicina personalizada. Se trata de una
nueva forma de entender la sanidad, basada en el análisis exhaustivo de la situación actual y pasada del paciente, para analizar la posibilidad de desarrollar enfermedades en un futuro. Esta capacidad de la
medicina personalizada se debe a tres pilares: la genómica y el desarrollo del diagnóstico molecular, la digitalización de la sanidad y el avance del
big data biomédico.
Durante la inauguración, uno de los organizadores destacó que el objetivo es “procurar el tratamiento adecuado para cada paciente en el momento concreto que lo necesita”, con el fin de mejorar su salud. La medicina de precisión ya es una realidad para el sector oncológico y se está activando en el tratamiento de enfermedades raras. Los tratamientos personalizados en esas especialidades son solo el comienzo; la hematología, las neurociencias o la oftalmología son áreas de desarrollo inmediato de la medicina personalizada.
La medicina de precisión ya es una realidad para el sector oncológico y se está activando en el tratamiento de enfermedades raras
Una experta en diagnósticos afirmó que la medicina de precisión “aspira a identificar a los pacientes que difieren en su susceptibilidad a una determinada enfermedad, su pronóstico de la misma o su respuesta a un determinado tratamiento mediante el análisis y la integración de datos genómicos, radiológicos, clínicos o del entorno del paciente”. La secuenciación del genoma humano (ADN) es el primer paso para lograr esta meta.
Julián Isla, experto en Inteligencia Artificial, destacó la importancia del análisis de datos para la resolución de determinados problemas de salud. Prevé que “en un futuro, el diagnóstico médico se basará en un pronóstico matemático que será el resultado de combinar numerosos algoritmos y datos de muy diversas fuentes”. Se estudiará al paciente, un sistema biológico complejo, de manera integral para dar la respuesta más precisa a las enfermedades que padece.
A pesar de que la tecnología jugará un papel fundamental en la medicina del futuro, los profesionales seguirán siendo insustituibles. Es por ello que durante la jornada se destacó la importancia de que el sector público apoye, fomente e invierta en la investigación de nuevos marcadores con el fin de posicionar a España como una de las potencias vanguardistas de la medicina personalizada, así como continuar formando a los profesionales sanitarios.
Referencia
OAD-ES-AMG-0001